"Su rostro no pertenecía a un muchacho, si no a un hombre, pero no era sólo el de un hombre, ya que unos rasgos de mujer, como una imagen superpuesta, se entremezclaban a sus rasgos. Luego, por unos instantes no fue ni mujer ni hombre, ni joven ni viejo. Se volvió milenario: milenario, marcado por épocas y edades inmemoriales, cómo una estrella, o un árbol fuera del tiempo. Quizás era hermoso, no lo sé, Tampoco sé si me atraía o me causaba rechazo. Mi única certeza es que era distinto a los seres humanos, indescriptiblemente distinto"
Nací en una casa cercana al río en donde nunca me quisieron
Como éramos muchos hermanos me echaron tempranamente a la calle
Ahí supe no supe que hacer, por suerte una perra vieja me enseñó a sobrevivir
Yo sólo la tenía que seguir, ver lo que hacía e imitarla. Así aprendí casi todo
Aún recuerdo cuando robé por primera vez de la carnicería
Iba yo feliz corriendo con un pedazo de carne en el hocico mientras me pegaban escobazos
Recuerdo que me gustaba salir persiguiendo a los autos y a las gaviotas del muelle
o echarme a descansar entre los sacos y quintales que descargaban desde los cargueros
Dormía a los pies de una laga escalera en una subida a uno de los cerros
El frío abundaba, pero peor era la lluvia, ahí no tenía donde abrigarme
Poco a poco fui creciendo, y con eso la gente me dejó de querer
Si antes no faltaban las personas piadosas que me dieran pan con leche
Ahora con suerte podía aspirar a las migajas que caían de la gente que comía en la plaza
Y enflaquecí considerablemente, y mi peló comenzó a caerse a pedazos
Le repugnaba a la gente, y cuando me veían se alejaban raudas y lloraban los niños
Recuerdo un día durmiendo bajo el muelle en que unos borrachos intentaron quemarme
Yo sólo quería defenderme sin hacerles daño, pero me rompieron las vertebras de un fierrazo
¿Quién me iba a querer así? Viejo, feo, destruido.. realmente daba pena
Ayer mientras escapaba de unos perros que me perseguían, me atropelló un camión
Ahora me duele la pata, no la puedo mover ni apoyar, pero nadie me ha ayudado
Veo que se acerca el fin de mi vida, y por eso la testifico por este medio
Siempre me dijeron que llevaba una vida de perros
Pero nunca fue mi elección, nací humano y la sociedad me perrunizó
...Y en ese momento desperté, no sabía donde estaba
estaba todo lleno de sillas y mesas, y abarrotado de gente
parece que recordaba con Borges o Cortázar, no recuerdo bien decidí salir a tomar aire, pero el frío parisino me helaba
Los coches yacían volcados, y aún sus metales hervían
El aire aún lloraba y hacía llorar forzadamente incluso al más feliz
Las murallas eran un cuaderno abierto donde el pueblo había escrito poemas
Y yo.. bueno, yo venía saliendo de un café parisino
¿Qué hacía yo ahí? No sé, salí a caminar y llegué hasta allí
Todos lo comentaban: se habían levantado los estudiantes
Que el mundo nuevo estaba por llegar, que no respetaban nada establecido
...Hasta que llegué a París, y tenían razón, todo era así de bello
Tras varias horas de resistencia en la Rue de Les Champs-Elysees
finalmente me cansé, necesité un café, y este lugar me llamó
Que sorpresa al ver a Borges ahí, o Cortázar, se me confunden a veces
La cosa es que me invitaron a un vino, y no podía negarles la compañía
Hablamos toda la noche de cosas que sólo se entienden en Paris
Y el vino y el Xerez Corría en cantidades industriales por la mesa
Hablamos en español, francés, latín e inglés
Y afuera... Bueno, afuera había un caos... un hermoso caos
Finalmente el vino me venció, me venció y me quedé dormido
Dormí mucho tiempo, quizá horas estaba cansado
Pero entonces entró la policía al café con sus palos y escudos
y como siempre, echaron todo a perder